jueves, 24 de julio de 2014

lunes, 21 de julio de 2014

FIESTA EN LA GALAXIA


Explicación del niño: «Este dibujo es que unos niños querían viajar a la Galaxia y así lo hicieron. Luego hicieron una fiesta y cada uno fue al planeta que tenía la primera letra igual que la primera letra de su nombre. La fiesta estaba muy chula porque flotaban las cosas».

- Niños viajan por el Sistema Solar con plena libertad y desenvoltura.
- Incluso un bebé (el tal Marc) se suma al viaje espacial.
- Silvia elige la superficie del Sol para jugar.
- Nadie va al cinturón de asteroides. El cinturón de asteroides es caca, es para perdedores.

OSO VESTIDO SPORT E INFORMAL


Explicación del niño: «El dibujo va sobre un oso que lleva ropa de humano. Tiene unas deportivas en los pies y unos pantalones negros con una camiseta de capucha blanca con un grafiti detrás a la espalda».

«PLANETA QUE AHORA NO SÉ CUÁL ES»

Vuelvo a las andadas. Aquí os traigo una nueva entrega de dibujos que encargué a niños y de los cuáles me aprovecho de forma absolutamente interesada y desaprensiva. 


Explicación del niño: «Este dibujo es un planeta que ahora no sé cuál es, pero y ya está, era lo que se me venía a la mente. Están ahí patinando y haciendo cosas. Y el perro verde es por el dicho».

- Niños patinando y montando en bicicleta por los anillos de Saturno.
- Flores del tamaño de continentes.
- Estrellas geométricas (de las que se dibujan con dos triángulos uno encima del otro en posición inversa) en lo más hondo del firmamento decoran el cielo de papel. 
- Un perro verde (el de la frase hecha «más raro que un perro verde») y gigantesco es el único ser vivo que habita Saturno (los niños juegan en los anillos en calidad de turistas espaciales, pero no son habitantes del planeta). 

martes, 15 de julio de 2014

Fundiciones Vol. V

Gareth Bale es un poco esto. No me digáis que no...


Monje tibetano y su aprendiz usan Fenistil

Monje tibetano y su aprendiz usan Fenistil, un hidrogel antihistamínico que alivia el picor y la irritación.

Monje tibetano y su aprendiz no están dispuestos a practicar la meditación y la religión budista exponiéndose a picaduras de insectos sin una pomada antiinflamatoria que les alivie sintomáticamente del picor y otros fenómenos alérgicos.

Monje tibetano y su aprendiz no renuncian a los avances médicos de la civilización moderna por el mero hecho de adoptar un estilo de vida tántrico y entregado a la introspección. 

Monje tibetano y su aprendiz combaten el picor usando Fenistil. Lo adquieren en una farmacia cerca del templo lamaísta donde viven.

Monje tibetano y su aprendiz profesan la religión sincrética del budismo vashraiana con la comodidad de tener lo útlimo en ungüentos para el picor.


Monje tibetano aprovecha el nombre del producto farmacéutico para meditar. Alarga el último sonido de la palabra para entrar en trance: «Fenistilllllllllllllllllll...».

Contratan a monje tibetano y su aprendiz para anunciar un producto farmacéutico de lo más novedoso e intentan concluir el spot con un breve lema que no queda nada bien con la naturaleza silenciosa y mística de los budistas: «Apto para bebés a partir de un mes».

lunes, 14 de julio de 2014

Trollear a un homínido del Neolítico

Si me dieran la posibilidad de viajar a la época del pasado que quisiera, elegiría alguna edad de la prehistoria y pediría que me enviasen a algún punto geográfico donde se supiera que en unas horas se va a producir un asentamiento nómada. Montaría todo un equipo de sonido con altavoces de concierto y, segundos antes de la llegada de la tribu nómada, pondría a reproducir un CD con los grandes éxitos de Michael Jackson, Steve Wonder y Al Jarreau, empezando por el clásico Billie Jean. Me escondería y observaría la reacción de los desconcertados homínidos.

PD: La elección de los temas atiende a gustos absolutamente personales, aunque es cierto que la decisión de empezar con Billie Jean tiene que ver un poco con el morbo de ver cómo responden los homínidos a una base tan rítmica y discotequera.






Fundiciones Vol. IV

Quizá no haya escogido las fotografías en las que más se parecen (tenía prisa por acabar), pero juraría que Huntelaar, si se volviese adicto a las drogas y se pusiera con el glam rock, tendría mucho de David Bowie.


Fundiciones Vol. III

Si metes en un mixer los rasgos angelicales y la delicada fisonomía facial de Jennifer Connelly y el rostro exacerbado y aritmético de Uma Thurman, emerge Famke Janssen. En serio, os lo juro.


viernes, 11 de julio de 2014

El estreno

El día que me regalaron mi primer y único ordenador portátil hasta la fecha, lo primero que hice fue abrir el Paint y dibujar un Shin Chan con el ratón táctil. Lo curioso es que puse de nombre de archivo «Primer dibujo en paint», como suponiendo que habría más dibujos en Paint en el futuro. De hecho, incluso creé una carpeta a la que nombré «Paint», expresamente para meter archivos de Paint. No sé en qué estaría pensando... Me encuentro con el archivo hoy día 11 de julio de 2014, casi cinco años después de haberlo creado. No siento ninguna emoción especial por ello. Y tampoco lo considero tan curioso como para enseñároslo. De hecho, es una mierda. Pero tengo que publicar contenido a toda costa. Cualquier cosa es buena, incluso si tengo que renunciar a mis principios y responsabilidades éticas como blogger y creador de conteniPERO QUÉ COÑO DICE SI SIEMPRE PRODUCE EL MISMO CALIBRE DE GILIPOLLECES.


domingo, 6 de julio de 2014

Nigromante epeluznante

Nigromante espeluznante sale a correr
decide ponerse en forma y hacer ejercicio
médium lúgubre a la luz del día se deja ver
va a marcha lenta, me saca de quicio.

Trota vagamente, como un pobre ser
el hechicero necesita ayuda, yo lo acaricio
la magia no sirve de nada, ya lo vas a ver
miserable nigromante, va camino del desquicio.

«Todo esto del footing ha sido una mala idea»
piensa el nigromante, con una angina de pecho
«Va, dos kilometros más y paro a descansar»
se autoconvence el brujo con la muerte al acecho.

Se lo piensa mejor, el chándal no es lo suyo
vuelve a los demonios, que no le fatigan
aún le quedan fuerzas para un último conjuro
pero no va a ser fácil, las agujetas le hostigan.

Nigromante espeluznante, se parece a Paco Buyo
pero no viene al caso, la cuestión es otra
malditos demonios, peores que el trullo
le gritan al oído y le llaman idiota.

Está bajo presión, su estado mental es macabro
Se plantea el suicidio, el nigromante desespera
¿Suicidio de qué? Si hizo un pacto con el diablo...
Vejez eterna, eso es lo que le espera.

Invoca a Lucifer, le dice que lo siente
Satán se ríe, es un cabrón sin miramiento
intenta dar pena, le implora que sea benevolente
se lo lleva al infierno, mientras le echa el aliento.

COMO ESCARMIENTO.


viernes, 4 de julio de 2014

Breve antología de notas de móvil

Una serie de anotaciones perdidas que tenía por el móvil y que he decidido reunir en una escueta antología porque publicarlas por separado implicaba mucho más trabajo (más clics de ordenador, una mayor cantidad de entradas, pensar un título para cada una...). Así mejor, todo de una sentada. 


Un breve coloquio:
- Se rumorea que moriré a las seis y treinta y cuatro del día 7 de julio de 2043.
- ¿Y eso?
- Me lo ha dicho un pajarito.
La muerte le había visitado y le había revelado el momento exacto de su muerte, pero él seguía queriendo que todo pareciese normal y trataba la información como si fuera un chismorreo. 


Tener sexo con cabello humano. Follar pelo de persona. Un tío que solo obtiene placer con esto. Aparte de eso, como mucho, puede excitarse algo pensando en cueros cabelludos, que no en calvas, ojo. Técnicamente [anatómicamente] son lo mismo, pero conceptualmente no.


El miembro de la tribu nómada indicó por señas lo que parecía ser una dirección de correo electrónico (hizo claramente el gesto que simbolizaba la arroba). 



Un buen día, a ese individuo con el que siempre te saludas con un leve gesto de cuello cuando os cruzáis por la calle pero con el que no tienes ningún tipo de relación personal más allá de eso se le ocurre romper el estandarte y saludarte con gran efusividad, dándote la mano y asintiendo con la cabeza. Acto seguido, el tipo te increpa por no hacer tú lo mismo y te acusa de antipático y de maleducado. Tú no dices nada, te quedas atónito con este casual. El balón ha hecho un extraño, ahora está en campo contrario. Algo se ha enquistado y no sabes qué. Al despedirse, el conocido te vuelve a dal la mano e intenta un intercambio de camisetas en señal amistosa. 


En cuanto tiene oportunidad (no haya nadie alrededor), corre a tope unos metros y para de repente. Hace un sprint implacable de tres segundos y para en seco. Es su manía y había que respetarla. 


Antes de hacer la compra, siempre se hacía una lista con las cosas que no debía comprar bajo ningún concepto. Eran muchas cosas. Perdía una hora y pico apuntando todo lo que se le ocurría y todavía se le escapaban cosas. Lo más grave es que se le olvidaba la lista en casa el 76% de la veces (porcentajes muy precisos en una narración literaria; tampoco descuadra mucho, como soy el narrador omnisciente, me puedo permitir el lujo de conocer estas cosas). 


Enloqueció muy fuerte y, en esta vorágine de locura, alucinaba con que era secuestrado y desarrollaba cierto afecto hacia el secuestrador. Contrajo un Síndrome de Estocolmo hiperpsicológico raro. Su amigo imaginario era a la vez la causa de su locura (lo tenía retenido) y su píldora tranquilizante (le caía bien). 


De repente, ciertas especies de animales, presas del aburrimiento, desarrollan la escritura para entretenerse. La invención no responde a ninguna necesidad concreta de progreso o subsistencia, es solo en busca de un poco más de divertimento. Un poco de distracción en la vida de algunos tipos de anfibios y mamíferos en una naturaleza que ya tienen demasiado vista. 




Células en el colegio

Cuando era pequeño y empezábamos a ver las células en la asignatura de conocimientos del medio, la fonética de los nombres «eucariota» y «procariota» me recordaba mucho a «Carioca», la marca de rotuladores y bolígrafos. Me viene a la memoria un sistema que me inventé para saber cuáles eran las células eucariotas y cuáles las procariotas. Resulta que en el libro la representación de la célula eucariota era más colorida, tenía más tonos cromáticos y estos eran más distintos entre sí. Por contra, las distintas partes de la célula procariota no se diferenciaban tanto en color, eran más homogéneas. Yo, no sé de qué manera, asocié la diversidad y la pluralidad de tonalidades con la complejidad celular. De este modo, la célula eucariota, que es más compleja que la procariota, era la que «tiene muchos colores». y la procariota la que «tiene pocos». La marca «Carioca», por asociación abstracta, me ayudó en mi aprendizaje acumulativo, ya que nunca se me ha olvidado ya cuáles son las células eucariotas y cuáles las procariotas. Desde entonces tengo una deuda con la persona que ideó el nombre de la empresa.




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